¿Debe declarar ante el juez de instrucción o de guardia?

Esteban Abogados Penalistas. Abogados Penalistas Barcelona. Especialistas en Derecho Penal.

Por Marco Esteban
Abogado Penalista

Depende. Ante la policía es más habitual acogerse al derecho a no declarar, pero con el juez de instrucción o de guardia la decisión es más complicada. La negativa a declarar en el juzgado supone que el juez de instrucción únicamente va a contar con una versión de los hechos, la del denunciante, y no tendrá otra alternativa que abrir juicio oral, ya que no se habrá aportado ninguna coartada o evidencia para defender tu inocencia, a menos que sea obvia por sí misma la ausencia de delito. Si existen indicios racionales de la posible existencia de un hecho delictivo, el juez estará obligado a enviarle a juicio, para que sea allí donde se resuelva si es o no culpable.

Por otra parte, al juzgado de instrucción puede ir en libertad o detenido. Si va como detenido y el delito es suficientemente serio, el fiscal puede solicitar al juez que te envíe a prisión provisional. Negarse a declarar en esta situación incrementará la probabilidad de ir a la cárcel a la espera de juicio, puesto que no le habrá ofrecido al juez razones para pensar que tal vez no haya cometido el delito y que no piensa fugarse antes del juicio si le deja en libertad. Conviene entonces declarar, excepto en el caso de que las evidencias de que es el autor de un delito grave sean tan contundentes que la decisión judicial de enviarle a prisión provisional se dé prácticamente por segura.

Si va a ir a prisión tanto si declara como si no lo hace, o bien si declara en situación de libertad, su decisión de declarar dependerá de su respuesta a la siguiente pregunta: ¿puede aportar alguna información en su declaración de instrucción que pueda servir, si se aporta cuanto antes, para archivar el proceso penal sin llegar a juicio o ganar el futuro juicio? Si no puede, es mejor que no declare, puesto que de esta forma su declaración en el posterior juicio no estará limitada por lo que haya dicho anteriormente en su declaración de instrucción, donde probablemente contaba con menos información sobre el proceso penal, al encontrarse en una fase inicial.

Como puede ver, saber cuándo declarar o no es verdaderamente complejo. Es una de las encrucijadas del proceso penal más importantes, puesto que es un factor estratégico con una importante incidencia en el resultado del proceso que debe analizarse caso por caso.